Diego Santos Márquez explora los silencios de la vida en pareja y el peso del dinero en la narrativa contemporánea

Loca Serenidad (Hasta que el dinero nos separe) plantea una reflexión íntima sobre el amor, la estabilidad y las decisiones que definen una vida compartida

En un panorama literario donde las historias cotidianas cobran cada vez más valor, Diego Santos Márquez regresa con una novela que mira de frente a una de las grandes tensiones de la vida adulta: la relación entre el amor y el dinero. “Loca Serenidad (Hasta que el dinero nos separe)” se presenta como una obra cercana, honesta y profundamente reconocible, que invita al lector a reflexionar sobre las decisiones silenciosas que marcan una relación.

Nacido en Ojén (Málaga), donde reside actualmente, el autor ha ido construyendo una trayectoria marcada por la observación de lo cotidiano y la emoción contenida. Tras varios libros publicados, esta nueva novela supone un paso adelante en madurez narrativa y profundidad temática, abordando sin artificios cuestiones universales como la convivencia, la ambición, la estabilidad económica y los afectos puestos a prueba.

Una historia de amor atravesada por la realidad

Ambientada en Oviedo, ciudad que inspira y vertebra la novela, la historia sigue a Valeria y Jaime, una pareja joven que decide empezar de nuevo lejos de su entorno habitual. Lo que comienza como un proyecto común pronto se ve condicionado por el peso de las deudas, las expectativas y los silencios no dichos. En este contexto, el dinero deja de ser un simple recurso para convertirse en un elemento que tensiona la relación y redefine prioridades.

Lejos de idealizar el amor, la novela apuesta por mostrarlo desde su vertiente más realista: la de las renuncias, los miedos y las decisiones que no siempre se verbalizan. La serenidad a la que alude el título no es un estado permanente, sino una búsqueda constante, frágil y muchas veces condicionada por factores externos.

El estilo de Diego Santos Márquez se caracteriza por una prosa clara, emocional y directa, que permite al lector reconocerse en los personajes sin necesidad de grandes giros argumentales. La fuerza de la obra reside precisamente en esa capacidad para reflejar conflictos comunes desde una mirada literaria honesta y sin concesiones.

Una trayectoria que consolida una voz cercana al lector

“Loca Serenidad” se suma a una bibliografía que ya incluía títulos como “Té con Raúl”, “Té Quiero” —finalista de los Premios Círculo Rojo— y “Sorpresas te da la vida”. Con esta nueva publicación, el autor consolida una voz narrativa que huye del efectismo y apuesta por historias con fondo humano y social.

El libro ha despertado interés no solo por su contenido, sino también por elementos que enriquecen su contexto cultural, como el prólogo firmado por Ana Cristina Tolivar Alas, biznieta de Leopoldo Alas “Clarín”, que establece un sugerente vínculo con la tradición literaria ovetense. Este detalle refuerza la conexión entre la obra y la ciudad que la acoge, aportando una capa simbólica que muchos lectores han valorado especialmente.

Las primeras opiniones recibidas coinciden en señalar la capacidad de la novela para generar reflexión una vez finalizada la lectura, dejando una sensación de reconocimiento y pausa más que de cierre definitivo.

Letrame Grupo Editorial y el acompañamiento al autor

Letrame Grupo Editorial ha respaldado esta obra dentro de su apuesta por autores que trabajan desde la autenticidad y la cercanía con el lector. En un momento en el que muchos escritores se preguntan cómo publicar un libro sin perder su voz propia, el recorrido de Diego Santos Márquez muestra que es posible publicar un libro manteniendo coherencia, identidad y un mensaje claro.

Desde la editorial se ha valorado especialmente el enfoque humano de la novela y su capacidad para conectar con lectores de distintas edades, gracias a una temática transversal que atraviesa generaciones y contextos sociales.

Una novela que invita a detenerse

“Loca Serenidad” no busca respuestas fáciles ni finales complacientes. Su mayor logro es plantear preguntas incómodas desde la serenidad de lo cotidiano: ¿qué estamos dispuestos a sacrificar por la estabilidad?, ¿hasta qué punto el dinero condiciona nuestras relaciones?, ¿qué silencios aceptamos para seguir adelante?

Con esta obra, Diego Santos Márquez confirma su compromiso con una literatura que observa, escucha y acompaña. Una novela pensada para lectores que valoran las historias con alma, capaces de emocionar y de quedarse resonando mucho después de cerrar el libro, y que encuentran en la lectura no solo entretenimiento, sino también un espacio de reflexión personal.

 

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